COMUNICADO DE PRENSA UNA. Con información de CARLOS TREJO SERRANO. NOTIMEX.
CIUDAD DE MÉXICO. En los últimos años, el pollo mexicano se ha consolidado como la carne preferida por las familias de nuestro país, al pasar de un consumo de 19.86 kg por habitante en el año 2000, a 28.31 kg por cada mexicano al cierre de 2018 (casi 10 kilogramos), informó la Unión Nacional de Avicultores (UNA). En cuanto al consumo aparente, que incluye las importaciones de pollo, fue de 32.51 kg per cápita.
De acuerdo al organismo que agrupa a los avicultores nacionales, el ritmo de crecimiento en el consumo de pollo mexicano ha sido constante año con año y se espera que al término de 2019 el consumo per cápita alcance los 28.75 kg, mientras que el consumo aparente llegue a los 33.15 kilogramos.
Asimismo, el aumento en el consumo ha sido posible por la oferta en la producción nacional de pollo, que en 2018 fue de 3 millones 470 mil toneladas, representando un crecimiento de 2.6% respecto a la producción de 2017.
Para este año, los avicultores estiman un crecimiento de 3% en la producción de pollo mexicano, cerrando en 3 millones 575 mil toneladas. La UNA señala que la gran capacidad de producción de pollo que tienen los avicultores nacionales es suficiente para abastecer la demanda del mercado mexicano.
En nuestro país, la producción de pollo tiene presencia en la mitad del territorio nacional, siendo Veracruz (12%), Aguascalientes (11%) y Querétaro (10%) las entidades con mayor volumen de producción. El resto se compone de la siguiente forma: La Laguna 9%, Jalisco 8%, Puebla 7%, Chiapas 6%, Guanajuato 6%, Yucatán 6%, Sinaloa 4%, Estado de México 4%, Nuevo León 3%, San Luis Potosí 3%, Morelos 3%, Hidalgo 3% y Nayarit 2 por ciento.
Actualmente, la producción avícola mexicana representa el 63% de la producción pecuaria nacional, de la cual, la carne de pollo aporta el 34.7%. Por otra parte, el pollo contribuye con el 38% de la proteína que aporta el sector pecuario a los mexicanos.
Avicultores reprochan decisión de abrir cupo de importación
Los avicultores están preocupados por la decisión que tomó la Secretaría de Economía (SE), al abrir un cupo para importar 55 mil toneladas de pollo libre de aranceles.
“No estamos muy satisfechos con la decisión que tomó la Secretaría de Economía”, sostuvo el presidente ejecutivo de la Unión Nacional de Avicultores (UNA), Arturo Calderón Ruanova, al dejar en claro que de ninguna manera comparten los argumentos para ampliar el cupo.
En 2013 se abrió un cupo anual para importar 300 mil toneladas de carne de pollo, con la intención de atender los estragos de la crisis que provocó la influenza aviar en el mercado nacional.
El viernes pasado, a través de Diario Oficial de la Federación (DOF), la Secretaría de Economía dio a conocer que “el monto establecido para la importación se ha ejercido en su totalidad, por lo que, a efecto de evitar un desabasto de este producto, resulta conveniente mantener abiertas las opciones de proveeduría externa”.
“Y en consecuencia ampliar el monto de cupo para importar carne de pollo fresca, refrigerada y congelada, como una medida que complemente la producción nacional”, expone el documento.
Sin embargo, Calderón Ruanova dijo a Notimex que en México no hay desabasto de carne y mucho menos se tienen problemas de sanitarios, como lo manifestó la dependencia a cargo de Graciela Márquez Colin.
Contrario a ello se ha registrado una afectación por el comercio desleal de pierna y muslo de pollo provenientes de Estados Unidos, lo que le impide a la industria mexicana crecer más allá de 3.0 por ciento anual, apuntó.
“Podemos crecer a lo doble y no lo hacemos porque hay prácticas desleales del comercio con Estados Unidos y porque se abre unilateralmente la importación a terceros países, como Brasil, sin dejarme nada a cambio para el mercado nacional”.
Remarcó que la reciente medida pone en condiciones más vulnerables a los avicultores porque, además, no hay ninguna disminución en los precios para el consumidor final. “No están ayudando las importaciones”.
Tampoco se ha generado el número de empleos requeridos por la industria, pues la actual situación la ha orillado a dejar de producir 250 millones de aves en México y dejar de generar 100 mil puestos de trabajo directos e indirectos.
“Eso desmotiva a los empresarios a continuar su compromiso de inversión en las zonas del sur-sureste, como nos los pidió la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader)”.
El presidente del Consejo Nacional Agropecuario (CNA), Bosco de la Vega Valladolid, consideró que no se deben abrir más cupos de los necesarios porque se corre el riego de desplomar el mercado interno y afectar la producción de la carne de pollo.
“Debemos buscar un equilibrio para que no haya desabasto, pero tampoco se afecte la producción interna. Desde que abren (el cupo), lo ideal es que lo manejemos coordinadamente, entre el gobierno y la iniciativa privada”.
El dirigente agrícola coincidió con Calderón Ruanova, al dejar en claro que México ha sido muy cuidado en los temas de sanidad animal y hoy en día son pocos los casos registrados de influencia aviar.