El aguacate michoacano rompió récord de producción, pero ello implica que aumentaron las hectáreas para su cultivo.
MORELIA, Michoacán. Como cada año, la producción de aguacate repunta en Michoacán. Datos del Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP) revelan que durante los primeros dos meses de 2021 se cosecharon poco más de 381 mil toneladas de este fruto, para un incremento del 5.5 por ciento comparado con el mismo periodo del año pasado.
Destaca que, pese a que el avance tan marcado en el cultivo del ‘oro verde’ está considerado un grave riesgo ecológico, la superficie de terreno dedicada para su producción aumenta también año con año. Mientras a inicios de2020 se prospectaron 169 mil hectáreas para sembrar aguacate, para este año suman ya 174 mil.
Y es que, mientras por un lado dependencias medioambientales mantienen un discurso sobre el control de ciertos monocultivos, cada semestre autoridades norteamericanas (la USDA) y mexicanas, de la mano de la Asociación de Productores y Empacadores Exportadores de Aguacate de México (APEAM) certifican miles de hectáreas para poder enviar el producto a EUA, lo que incentiva la competencia y la necesidad, en muchos casos, de contar con más hectáreas para producir y multiplicar las ganancias.
La intención de la APEAM, de hecho, es aumentar de 40 a 44 los municipios michoacanos con huertas certificadas este año.
Los datos del SIAP apuntan que en el primer bimestre de 2021 se han logrado 381 ml 734 toneladas de aguacate, mientras que ya se dedicaron para todo el año 174 mil 992 hectáreas. En 2020, la cifra era de 361 mil 644 toneladas, y 169 mil 939 hectáreas sembradas de árboles de aguacate.
El año pasado se cerró la producción con un millón 800 mil toneladas, con un valor de la producción de 39 mil 616 millones de pesos, tomando en cuenta que la tonelada de aguacate a pie de huerta se cotizó en 22 mil pesos.
A mercados extranjeros se enviaron un millón 180 mil toneladas, mercados donde el ‘oro verde’ multiplica su valor y en el que los exportadores obtienen gigantes ganancias.
Sobre el tema de la exportación, el presidente de la APEAM, Gabriel Villaseñor, señala que no se tiene todavía tanta claridad por el tema de la contingencia sanitaria por la COVID-19, sin embargo, señaló que la organización mantiene su agresiva campaña de promoción en el mercado norteamericano y tienen de momento un 7 por ciento de aumento en los envíos a otros países.
Recordó que el 85 por ciento de las exportaciones de este fruto se realizan a dicho país, y aunque nuevamente se rompieron récords de exportación en 2020, tuvieron que negociar para mantener el flujo de aguacates. “Fue importante acoplarnos y mantener los importantes nichos en el extranjero, sobre todo Estados Unidos, nos vimos obligados a reducir precios para conservar la continuidad de embarques”, dijo.
Detalló Villaseñor que, del aguacate de exportación, se enviaron 962 mil a Estados Unidos, unas en 58 mil toneladas más que la temporada anterior. El resto del producto, 218 mil toneladas, tuvo como destinos principales Asia, Europa y Centroamérica, “embarques que también registraron un leve incremento”.
Reconoció el directivo de la APEAM que ante el escenario incierto que sigue existiendo por la pandemia, con todo y los avances en los esquemas de vacunación en cada país, el objetivo de momento sería igualar los números de la temporada 2019-2020.
“Con eso estaríamos contentos y felices a pesar de que tener que bajar los precios para atender las economías familiares que han sido golpeadas por la pandemia”, apuntó Gabriel Villaseñor, presidente de la APEAM.
No obstante, ante la eventualidad de un escenario adverso en tema de comercio exterior, que podría ser un nuevo cierre de fronteras en el mercado estadounidense, ya tienen un plan B, que consiste en repuntar en el mercado nacional.
De momento, el 2021 ha iniciado con un favorable 7% de incremento en las exportaciones, situación que, de cualquier forma, Gabriel Villaseñor toma con prudencia y cautela antes los escenarios complejos que persisten por la pandemia de la COVID-19.
Fuente: LA VOZ DE MICHOACÁN.
