Plan Maya II: agricultura comercial

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El pasado martes el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Víctor Villalobos, perfiló una estrategia de políticas públicas con apoyo internacional (incluyendao los mercados) para hacer frente a la tragedia humana de la migración: establecer un precio “justo”, una suerte de precio de garantía, para el café producido en la región, que eleve el nivel de vida de 600 mil familias, cuyos integrantes en un número cada vez mayor buscan llegar a Estados Unidos.

Para ello se requiere dinero y programas. Y quienes tocaron el punto nodal con un Manifiesto por el Rescate de la Alimentación de México, impulsado por el diputado Eraclio Rodríguez y el senador José Narro (ambos a cargo de las Comisiones de Agricultura y Desarrollo Rural de ambas Cámaras, y ambos morenistas), que reclaman se resarcir el presupuesto que le fue reducido en más de 8 mil millones de pesos a la SADER, con lo que se está desmantelando tanto programas de apoyo e  infraestructura de apoyo técnico para los productores de oleaginosas, arroz, maíz, trigo, sorgo y frijol; del sector pecuario, porcinos, lácteos, bovinos y avicultores, así como de cultivos de exportación como mango, tomate, aguacate, plátano, tequila, hortalizas, coco y vainilla. El Manifiesto, dirigido al Presidente Andrés Manuel López Obrador, señala que “por la instrumentación de las políticas (puntadas, ocurrencias) para el campo implementadas desde su gobierno y que están condenando al fracaso a los productores agroalimentarios y a la alimentación del pueblo de México. El Presidente (…) debe estar consciente que nos está poniendo contra la pared. Ante ello no tendremos otra salida que tomar medidas drásticas”. Así como el secretario Villalobos propone recuperar niveles de precio para el café para sacar a los cafeticultores de sus crisis (en México la producción cayó en casi 40% en 6 años),  extender la agricultura es una de las formas para hacer frente a la oleada de migrantes, tanto nacionales como foráneos.

MAURICIO FLORES.GENTE DETRÁS DEL DINERO. LA RAZÓN.