Presidencia reconoció que sí ha habido alzas en las extorsiones y en los dominios de mercados en la República Mexicana.
El presidente Andrés Manuel López Obrador, reconoció que sí ha habido alzas en las extorsiones y en los dominios de mercados en la República Mexicana. Esto, al ser cuestionado sobre el reporte de las incursiones de bandas criminales en pequeños comercios.
Ya que la semana pasada se vio este fenómeno en Chilpancingo, Guerrero. Una situación que provocó el desabasto de pollo, debido a la violencia registrada en contra de varios comerciantes vinculados a la venta de esta carne, los locales permanecieron cerrados por días. Así mismo la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes reportó que este suceso está presente en otros estados.
“Se esta atendiendo y es real, lo que más esta creciendo es la extorsión. Estamos trabajando en eso. En efecto, lo de Chilpancingo tuvo que ver con asesinatos por el cobro de cuotas o moches y estamos viendo eso. La policía, precisamente la Guardia Nacional está actuando y siempre en coordinación con las autoridades locales”, señaló el mandatario.
El presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, expresó que su gobierno está avanzando en disminuir otros delitos como el homicidio, pero no como quisieran. Sin embargo existe una leve disminución desde que tomó posesión en 2018. Han logrado bajar mucho en robo en general, en secuestro, en robo de vehículo pero la extorsión sigue incrementando.
Los violentos ataques contra los trabajadores de carne de pollo
El pasado sábado 11 de junio, un grupo de hombres armados irrumpió en una granja distribuidora de pollo, localizada en las afueras de Chilpancingo, la capital del estado de Guerrero, y asesinó a tiros a seis personas que se encontraban desplumando las aves. Entre ellas se encontraba el dueño del lugar y su hija de 14 años de edad.
Ese fue el tercer ataque contra trabajadores de la industria del pollo en menos de una semana. El pasado 6 de junio también, un vendedor y distribuidor de pollo, identificado como Tomás, de entre 35 y 40 años, fue asesinado de cuatro balazos, y frente a decenas de personas, en el mercado Baltazar R. Leyva Mancilla, uno de los más grandes de Chilpancingo.
Tres días después, el 9 de junio, aproximadamente a las 16:00 horas, dos distribuidores de alimentos que transportaban carne de pollo fueron atacados a tiros en el estacionamiento de carga y descarga del mismo mercado.
Esta serie de ataques en un periodo corto de tiempo contra trabajadores de granja, distribuidores y repartidores de pollo, provocó que el resto de los vendedores cerraran sus tiendas ante el temor de que les sucediera algo similar. Todos los fallecidos vivían o trabajaban en Petaquillas, al sureste de Chilpancingo, un lugar considerado como importante centro de producción de carne de pollo.
El delito de extorsión en México
El titular de la Secretaría de Gobernación, Adán Augusto López, durante su anuncio este 22 de junio para una iniciativa de ley acerca de recursos incautados por las autoridades por el delito de extorsión.
Destacó que se trata de uno de los que mayor preocupación genera en el país, a pesar de la inestabilidad que provoca la alta incidencia de homicidios dolosos, ya que el primero impacta en todos los rubros económicos y tiene diversas manifestaciones.
“Es muy complicado ganarle la batalla porque tiene diversas tipologías, no es nada más el conocido como derecho de piso, es la extorsión telefónica tradicional, entre otros”, aseveró el secretario de Gobernación.
De acuerdo con el Observatorio Interactivo de Incidencia Delictiva del Observatorio Nacional Ciudadano (ONC) tan sólo en 2021 se registraron 8 mil 827 carpetas de investigación por extorsión, así como un total de 9 mil 407 víctimas de este delito.
Con tales estadísticas, 2021 se posiciona como el año con mayor incidencia de extorsión desde que se tiene registro. De hecho, desde 1997 hasta 2021 sólo ha habido tres años en los que se han rebasado las 8 mil carpetas de investigación por este delito: 2013 (8 mil 213 carpetas), 2019 (8 mil 734 carpetas) y 2021.
En este mismo sentido, los datos publicados por el ONC muestran que el Estado de México es, con gran diferencia, la entidad en la que ocurre este delito con mayor frecuencia, pues de las carpetas totales acumuladas en 2021, el Edomex concentró 3 mil 302, es decir, más de la tercera parte (37% para ser exactos).
La violencia llegó hasta la fe
La ola de violencia no se detiene ante nada y esta vez llegó hasta las puertas de una iglesia, un sitio que parecía imposible de profanar. Dos sacerdotes jesuitas fueron asesinados en el municipio de Urique, Chihuahua, al interior de un templo de la comunidad de Cerocahui.
Los hechos se registraron el pasado lunes 20 de junio, donde Javier Campos Morales y Joaquín César Mora intentaron ayudar a un hombre que buscó refugio en el centro religioso luego de que fuera perseguido por sujetos armados.
El agresor persiguió a su víctima hasta el interior de la iglesia, donde abrió fuego contra los dos sacerdotes y el tercer hombre involucrado, de manera que las tres personas perdieron la vida en el lugar del ataque.
Los cuerpos de los clérigos, y del tercer asesinado que aún no ha sido identificado, fueron sustraídos del templo posterior a los homicidios. De manera extraoficial, medios locales señalaron a Noriel Portillo Gil, “El Chueco”, como el responsable del robo de los cuerpos de los sacerdotes, aunque esto no ha sido confirmado por las autoridades competentes.
Con información: Infobae.com